En la naturaleza, las mujeres son las que tienen la gran responsabilidad de poder engendrar nueva vida dentro de sus cuerpos. Esto gracias los órganos reproductivos y a una serie de hormonas femeninas como la progesterona y los estrógenos.
Ahora, si bien es cierto que la mujer nace con un número de óvulos capaces de convertirse, al ser fecundados, en una nueva vida, existen algunas causas por la que la capacidad reproductiva de las mujeres desaparece a temprana edad, trayendo consigo no sólo la perdida de la posibilidad de concepción sino que además se pueden apreciar otro síntomas colaterales como por ejemplo: cambios repentinos en el estado de ánimo, perdida del deseo sexual o en algunos casos problemas de somnolencia o perdida de sueño.
En ciertos casos estos síntomas van acompañados de la pérdida de la menstruación de manera permanente; pero no siempre se da.
Lo normal es que este episodio femenino se presente cuando la mujer alcance una edad madura que va entre los 45 a 50 años; pero cuando este cuadro hace su aparición antes de cumplir los 40 años o en una edad más temprana estaríamos hablando de una menopausia precoz o denominada también fallo ovárico prematuro.
En estos casos es necesario un tratamiento médico, porque aparte de los síntomas anteriormente descritos se dan otros cambios fisiológicos en el organismo como una descalcificación más rápida, por lo que generalmente se recetan suplementos para mantener los niveles adecuados de calcio en los huesos y evitar osteoporosis, así como hormonas para regular el funcionamiento del organismo.
Aunque no hay nada claro acerca de las posibles causas que originen la menopausia en una edad temprana, se toma como referencia los tratamientos que hayan incluido quimioterapias o radioterapias (como es el caso del cáncer), antecedentes familiares o enfermedades que hayan afectado al sistema inmunológico.
Via mujerok.com
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