Se trata de un trastorno muy común en las mujeres y en general es una patología curable y reversible. Explicaremos de qué se trata esta dolencia y los diversos tipos de quistes en los ovarios que pueden presentarse en el organismo de una mujer.
Quistes ováricos.
¿Qué son?
Los quistes son sacos llenos de líquido o fluido, que pueden desarrollarse enuno o ambos ovarios, dentro o sobre los mismos. Todos los meses cuando se comienza el ciclo menstrual de la mujer, empieza el crecimiento de un folículo, del cual posteriormente se desprenderá el óvulo. Si el sistema reproductor de la mujer se encuentra en condiciones de normalidad, luego de la ovulación el folículo, tras haber cumplido su función, se va reduciendo hasta desaparecer naturalmente.
En el caso de que el folículo no desaparezca de manera natural, se formará un quiste funcional folicular, que si persiste durante mucho tiempo, puede aumentar su tamaño.
Como explicamos anteriormente, este tipo de quiste es uno de los más comunes que se presentan en los ovarios normales. Se pueden presentar desde la pubertad a la menopausia y no tienen mayores complicaciones. Este tipo de quistes puede producirse por diversas patologías temporarias en la mujer y en la mayoría de los casos desaparecen naturalmente
Los folículos de Graaf, llamados así en honor al fisiólogo que los describió, pueden romperse a mitad del ciclo y provocar dolor menstrual. Por lo general, este tipo de quistes merman su tamaño al cabo de uno a tres meses, pero eso no obsta para que puedan aparecer otro u otros quistes similares. Este tipo de quistes casi siempre tienen carácter benigno (no canceroso), aunque puedan presentarse como sintomáticos o asintomáticos.
Quistes de cuerpo lúteo
Algunos de estos quistes ováricos funcionales suelen denominarse quistes de cuerpo lúteo o corpus leteum. Por lo general tienden a desarrollarse uno o más quistes benignos (no cancerosos) durante el final del ciclo menstrual, aunque también son comunes en los primeros meses del embarazo. La característica es que se presentan después de que el óvulo ha sido liberado del folículo, entonces la apertura por donde salió el óvulo se cierra y acumula líquido dentro del folículo. Si bien estos quistes pueden contener una ínfima proporción de sangre, suelen no acusar síntomas.
A los quistes funcionales se los suele denominar quistes hemorrágicos cuando contienen o liberan sangre en el caso de que se rompan. Aunque se trata de un tipo de quiste común, que no suelen revestir gravedad, el médico ginecólogo suele recomendar su eliminación a través de un procedimiento quirúrgico cuando existe sospecha de endometriosis.
Además de los quistes funcionales que acabamos de describir, folicular y de cuerpo lúteo, que se producen durante el proceso normal de ovulación, están los quistes ováricos fisiológicos, que se forman en razón de un problema específico.
Las células del revestimiento del útero o matriz se hinchan y engrosan. El cuerpo elimina estas células del revestimiento uterino o endometrio durante el período. Si estas células crecen por fuera del útero se produce la endometriosis.
Quistes fisiológicos endometrioides
Los quistes fisiológicos endometrioides o endometriomas se producen en el endometrio. El endometrio es el tejido que recubre el interior de la cavidad uterina. En este caso, son quistes con contenido hemático. Las células del revestimiento de la matriz o útero se desarrollan en otras áreas del cuerpo y pueden producir dolor, sangrado irregular y problemas de infertilidad.
Quistes fisiológicos dermoides
Estos son los que crecen en los ovarios de una forma de célula germinal (célula germinal totipotencial). Se caracterizan por contener una variedad de diferentes tipos de tejido físico sólido (tejido de la piel, del cabello, de la grasa, de los dientes y otros). Se presentan casi siempre en mujeres en edad fértil, en uno o en ambos ovarios y si crecen suele convenir su extirpación. Muchas veces los quistes ováricos fisiológicos dermoides pueden existir desde el nacimiento, aunque eclosionan durante el período fértil de la mujer.
Por último, cabe mencionar lo que se denomina síndrome de ovarios poliquísticos, donde los ovarios hasta pueden llegar a duplicar su tamaño. Se trata de un desequilibrio de las hormonas sexuales de las mujeres que, además de los quistes en los ovarios, se suele presentar con alteraciones en el ciclo menstrual, sangrado abundante, obesidad, resistencia a la insulina y dificultades para quedar embarazada o abortos espontáneos. Normalmente, durante el ciclo menstrual se liberan uno o más óvulos, es decir, se produce el proceso de ovulación. Se está en presencia del síndrome de ovarios poliquísticos cuando los óvulos maduros no se liberan de los ovarios y en su lugar se pueden llegar a formar quistes. Es un tipo de afección que suele darse más en la etapa de la adolescencia e incluso en la pubertad, en un 4 a 10 por ciento de las mujeres.
Via quedarembarazada.org
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