En 2016 se diagnosticaron 914 casos nuevos
El Día Mundial de la Salud centra su campaña en esta enfermedad
pamplona - La depresión es un trastorno afectivo, del humor, en el que la tristeza es uno de los síntomas claves. Es de tal intensidad que interfiere con la vida diaria cotidiana y causa sufrimiento tanto para quien padece el trastorno como para los que se preocupan por la persona afectada.
Se trata de una enfermedad común y grave, en la que la mayoría de personas que la padecen necesitan tratamiento para mejorar.
En Navarra, la Red de Salud Mental atiene a un total de 2.618 pacientes con depresión, de los que el 70,44% son mujeres y donde la mayor parte de los afectados (53,21%) tienen entre 40 y 65 años. Asimismo, durante 2016 se diagnosticaron un total de 914 nuevos casos entre la población adulta, donde también se observan diferencias por sexos: el 56,89% de los diagnosticados son mujeres, frente al 43,11%, que son hombres.
La depresión es un trastorno multifactorial y parece ser el resultado de una combinación de factores genéticos, bioquímicos y psicológicos, que facilitarían una vulnerabilidad a padecer trastornos en el estado de ánimo, según señala la jefa del Servicio de Área de Atención Comunitaria y Centros de Salud, Sara Chivite, quien apunta que no “se puede hablar de una única causa” cuando nos referimos a la depresión. Sus principales síntomas son un estado de ánimo irritable o bajo, dificultad para conciliar el sueño o exceso del mismo, un cambio grande en el apetito, cansancio y falta de energía, sentimientos de inutilidad u odio a sí mismo, dificultad para concentrarse, movimientos lentos o rápidos, inactividad y retraimiento de las actividades usuales, sentimientos de desesperanza, pensamientos de muerte o suicidio o pérdida de placer en actividades que antes solían hacerle feliz.
La depresión se asocia a menudo a otras enfermedades mentales, como lo son la ansiedad o el consumo abusivo de alcohol u otras sustancias, pero también a enfermedades orgánicas. Además, las personas con depresión presentan tasas elevadas de enfermedades (morbilidad), cronicidad y mortalidad. Numerosos estudios han encontrado que muchos de los síntomas de la depresión pueden deberse al descenso de los niveles o de la disponibilidad de varios neurotransmisores en el cerebro, entre los que destaca la serotonina. De hecho, la mayor parte de los medicamentos utilizados para tratar esta enfermedad incrementan la disponibilidad de este y otros neurotransmisores. De igual modo, se cree que la combinación de factores constitucionales, como la predisposición genética o la personalidad, y ambientales, como el estrés o el aislamiento social, hacen que una persona sufra una disminución de los niveles de estos neurotransmisores, desarrollando por tanto una depresión.
La recuperación
En diferentes países, especialmente en los desarrollados, se hace énfasis en la recuperación y el manejo de enfermedades para personas con trastornos mentales, entre los que se encuentra la depresión. El llamado Modelo de Recuperación enfatiza algunas acciones, como encontrar esperanza, empoderamiento personal y bienestar, expandir conocimiento sobre tu enfermedad y los trastornos, establecer redes de apoyo y buscar inclusión, desarrollar estrategias para sobrellevar el padecimiento, crear una base de seguridad o definir un propósito de vida y darle un significado. En cualquier caso, el camino a la recuperación es un proceso activo en el que el individuo tiene la responsabilidad sobre el resultado, dependiendo de la colaboración entre amigos, familia, comunidad y apoyos profesionales.
En este sentido, Chivite subraya que “la depresión es un trastorno tratable, aún en los casos más graves”. “El médico o profesional de la Salud Mental llevará a cabo una evaluación diagnóstica completa”, afirma, y añade que “es importante conocer cualquier antecedente familiar de depresión y obtener todos los antecedentes de los síntomas, cuándo comenzaron, cuánto han durado, su gravedad, o si ocurrieron antes” y, en este caso, “cómo fueron tratados”. Asimismo, destaca, “se valora si el paciente consume alcohol o drogas y si ha tenido pensamientos suicidas o de muerte”. Una vez diagnosticada la enfermedad, una persona con depresión puede ser tratada con varios métodos. “Los tratamientos más comunes son la medicación y la psicoterapia fundamentalmente de corte Cognitivo Conductual”, indica Chivite. También remarca que “la psicoterapia puede ser la mejor opción para tratar la depresión leve o moderada”. Sin embargo, en casos graves, “esto puede no ser suficiente”.
Prevención
En lo que se refiere a prevenir la gravedad y cronificación de la enfermedad, la jefa del Servicio de Área de Atención Comunitaria y Centros de Salud ve “importante solicitar ayuda de los profesionales”. En primer lugar, se recomienda acudir al médico de Atención Primaria, que será quien valore “la necesidad de ser derivado a un recurso especializado de Salud Mental”. En el caso de que el paciente presente ideación autolítica, la indicación es la de “acudir de forma urgente a un servicio de urgencias o ser atendido por un profesional de forma inminente”.
Por otro lado, expertos recomiendan llevar a cabo una serie de hábitos saludables en todas aquellas conductas que tenemos asumidas como propias en nuestra vida cotidiana y que inciden positivamente en nuestro bienestar físico, mental y social. Son precisamente estos hábitos saludables los que determinan la presencia de factores de riesgo o protectores para el bienestar. De hecho, en muchos casos previenen la enfermedad mental en general, no solo la enfermedad. Algunos de estos hábitos de vida saludable son consumir una dieta equilibrada, tener una higiene personal adecuada, tener un patrón y una calidad de sueño óptimo, realizar actividad física, evitar hábitos tóxicos como fumar o consumir drogas y alcohol, planificar el día, mantener siempre una actitud positiva, evitar el estrés innecesario o aprender más cosas sobre la depresión, sus causas y sus consecuencias.
El Post-it
Los objetivos de la OMS. La Organización Mundial de la Salud se propone este año como objetivo que un número cada vez mayor de personas con depresión en todos los países pida y obtenga ayuda. Asimismo, pretende que el público en general esté mejor informado sobre esta enfermedad, sus causas y posibles consecuencias y que los familiares, amigos y personas cercanas a las personas con depresión puedan apoyarlas.
Día mundial de la salud
Campaña de información sobre la depresión. El Día Mundial de la Salud, que se celebra hoy, tiene este año como fin informar sobre todo lo relativo a la depresión. Según la Organización Mundial de la Salud, la depresión afecta a personas de todas las edades y condiciones sociales. En el peor de los casos, puede provocar el suicidio. No obstante, se puede prevenir y tratar, y una mejor comprensión de la enfermedad y de cómo puede prevenirse contribuirá a reducir la estigmatización asociada a la enfermedad y aumentará el número de personas que piden ayuda.
Consejos
¿Qué puedo hacer si estoy desanimado o tengo depresión? La Organización Mundial de la Salud recomienda hablar de los sentimientos con alguien de confianza, solicitar ayuda profesional, no aislarse, hacer ejercicio regularmente, mantener hábitos regulares de alimentación y sueño, evitar la ingesta de alcohol y abstenerse de consumir drogas, seguir haciendo cosas que nos gustan y tomar conciencia de los pensamientos negativos y autocríticos y sustituirlos por pensamientos positivos
Quererse a uno mismo y hablar. Cruz Roja recomienda, en primer lugar, quererse como algo fundamental. Pero en el caso de que una persona no pueda más con la situación, insiste en que hay que soltar todo lo que llevamos dentro y hablarlo. Asimismo, recuerda que la depresión es una enfermedad caracterizada por una tristeza persistente y por la pérdida de interés en las actividades con las que normalmente se disfruta. Una situación que, afirma, puede padecer cualquier persona y en ningún caso es signo de debilidad.
Fuente noticiasdenavarra.com
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