El embarazo es una etapa importante en la vida de una mujer y, normalmente, también en la de su pareja.La decisión de quedarse embarazada debe ser tomada después de un periodo adecuado de reflexión, pues, el embarazo y la llegada de un nuevo miembro a la familia afecta fundamentalmente a la mujer y al futuro bebé, pero también al resto de miembros de la unidad familiar.
Afrontar el reto de un embarazo supone preparar el entorno familiar adecuadamente (la ropa, la cunita...) para la llegada del bebé; además, la futura mamá deberá prepararse física y psicológicamente para vivir esta experiencia de una forma emotiva y gratificante.
También es conveniente hablar con el médico de atención primaria y con el ginecólogo antes de tomar la decisión de quedarse embarazada, para valorar la posible existencia de determinados factores de riesgo y otros aspectos relacionados con la salud y las circunstancias específicas de la mujer.
Las relaciones sexuales abiertas a la concepción de una nueva vida u otras estregias modernas desarrolladas por la medicina pueden dar lugar a cambios en la mujer que nos anuncien la llegada del embarazo.
¿Estaré embarazada?
La desaparición de la menstruación, la aparición de náuseas matutinas, caprichos y otras alteraciones en el organismo de la futura mamá, como alteraciones digestivas, urgencia en acudir al servicio, aumento del tamaño de la mamas o acumulación de pigmento en los pezones, son algunos de los signos que pueden indicar el estado de buena esperanza.
Sin embargo, estos signos son sólo indicios, y no sirven para confirmar que existe un embarazo. Su ausencia tampoco excluye que la mujer esté embarazada.
La certeza del embarazo la dará el ginecólogo, quien con su exploración física y determinadas pruebas diagnósticas, como la ecografía y algunos análisis de sangre y orina podrá confirmar este hecho.
Ya sé que estoy embarazada, ¿y ahora?
Normalmente en las primeras visitas al ginecólogo se determina la fecha probable del parto y se proporciona a la futura mamá una tarjeta de embarazada en la que se programa el plan de seguimiento y control del embarazo y se valora la posible existencia de factores de riesgo, pudiéndose proporcionar consejo genético, cuando ello resulta oportuno y no se ha realizado en una fase anterior.
¿Qué hago si estoy trabajando?
La mujer que desarrolla una actividad laboral tiene unos derechos cuando se queda embarazada, pudiendo disfrutar de determinados periodos de descanso que pueden variar en función del lugar donde resida.
Es conveniente informarse adecuadamente al respecto, porque, además, la futura mamá también puede tener derecho a prestaciones económicas por la llegada al mundo de su bebé.
Del mismo modo, en muchos países la pareja de la mamá puede disfrutar de permisos para poder atender al bebé conservando determinados derechos en su puesto de trabajo.
¿Cómo me cuido durante el embarazo? ¿Quién me controla?
Durante los meses en los que se desarrolla el embarazo la futura mamá será valorada y explorada por su ginecólogo con ayuda de la enfermera, para realizar determinados controles y análisis y otras pruebas que puedan estar indicadas, determinándose, por ejemplo, el factor Rh, test de VIH, rubeola, ecografías, etc.
También recibirá información importante sobre hábitos y recomendaciones higiénico-dietéticas relativas a la alimentación, hábitos de descanso, eliminación de sustancias tóxicas como el consumo de tabaco, consumo de medicamentos, recomendaciones relativas al tipo de trabajo que esté realizando la mujer mientras está en activo durante el embarazo, etc.
¿Puedo tener relacione sexuales durante el embarazo?
Normalmente no hay impedimento para mantener relaciones sexuales durante el embarazo, si bien, en determinados casos es preciso consultar con el ginecólogo aspectos específicos relativos a la salud de cada mujer.
Hay que prestar especial atención si aparecen sangrados, antecedentes de predisposición al aborto, plalcenta previa y otra alteraciones o anomalías.
¿Puedo practicar deporte si estoy embarazada?
Normalmente las actividades deportivas que no exijan un esfuerzo excesivo para la mujer pueden ser realizadas, siempre a dosis bajas; sin embargo, dado que este aspecto es muy subjetivo, siempre se recomienda consultar con el ginecólogo el tipo de deporte y el grado de esfuerzo que se puede realizar.
En general, los deportes más recomendados son la natación, el paseo y algunos tipos de gimnasia específicos para mujeres embarazadas.
¿Qué puedo comer?
No existe una dieta específica para el embarazo, la alimentación debe ser equilibrada y adecuada a las necesidades de cada mujer.
Es conveniente evitar el sobrepeso, aunque está contraindicado realizar durante el embarazo curas de adelgazamiento.
La alimentación debe aportar suficiente cantidad de vitaminas y nutrientes que pueden obtenerse mediante el consumo de fibra, frutas y verduras.
El consumo de café durante el embarazo debe ser muy moderado, no recomendándose el consumo de alcohol ni de tabaco, tampoco el de otras sustancias estupefacientes.
El consumo de medicamentos deberá ajustarse únicamente a lo prescrito por el ginecólogo. No se debe tomar ningún medicamento que no sea imprescindible y siempre con el consentimiento del ginecólogo o del médico responsable.
Al acudir a cualquier otro médico la mujer siempre deberá manifestar su condición de embarazada, pues ello condiciona la adopción de numerosas estrategias diagnósticas y terapéuticas por parte del médico.
Via salud.es
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