skip to main | skip to sidebar

Salud y bienestar para las mujeres

Portada

  • Portada

martes, mayo 02, 2017

Cinco cosas que hay que saber sobre depresión y fertilidad

La depresión es una enfermedad que se caracteriza por una tristeza persistente y por la pérdida de interés en las actividades con las que normalmente se disfruta. El lema de la campaña que impulsa la Organización Mundial de la Salud este año es “Hablar de la depresión” y busca contribuir a su conocimiento y concientización. En este caso abordar cinco preguntas sobre cómo influye esta patología en la infertilidad.

¿Cuál es el vínculo que existe entre la depresión y la fertilidad?

La depresión, así como el stress, puede estar presente como causa o como consecuencia de la infertilidad. Una mujer puede no embarazarse producto de su depresión, así como una que no se embaraza puede presentar una depresión como consecuencia de su infertilidad.

Sin embargo, es difícil afirmar que una mujer no se embaraza a causa de su depresión netamente. Lo importante es que el paciente refiera al médico su malestar para poder tratarla y que el camino que deba afrontar sea más fácil.

¿Cómo afecta a la mujer y al hombre en la búsqueda de un hijo?

En las parejas puede afectar la sexualidad llevando a una disfunción que dificulta las relaciones. Se sabe, además, que en la mujer puede afectar el normal funcionamiento del sistema reproductivo, repercutiendo en la calidad de la ovulación, y por lo tanto dificultando el embarazo.

¿Es común este diagnóstico mientras se busca un embarazo?

En algún momento de la búsqueda se presenta algún grado de angustia, que en casos se convierte en depresión. El diagnóstico es clínico, y requiere en ocasiones de medicación, que tiene que ser indicada y controlada por especialistas que tengan en cuenta las particularidades que presenta la búsqueda de un hijo.

¿Cómo se afronta el diagnóstico para encarar los tratamientos?

Siempre es mejor para un tratamiento que la pareja esté en un buen estado anímico. Aunque cada caso es singular, en general los programas de ayuda psicológica, ya sean consultas individuales, grupales o la asistencia a grupos de co-ayuda son fundamentales no sólo porque brindan la contención necesaria sino por su incidencia en la psiconeuroendocrinología y el aumento de las posibilidades de éxito. Actividades como el ejercicio físico, el yoga, la meditación, la acupuntura, son útiles y de ser necesario postergar la búsqueda hasta que se estabiliza el aspecto emocional.

¿Puede perjudicar un tratamiento?

El estrés y la ansiedad pueden interferir en los resultados de los tratamientos, por eso es importante trabajar también sobre la preparación emocional.

En la medida en que la persona mejore su estado funcional general lo reflejará en una actitud de mayor apertura y mejor disposición y colaboración ante cualquier diagnóstico, procedimiento y tratamiento.

Via rionegro.com.ar
Etiquetas: La psicología

0 comentarios:

Publicar un comentario

Entrada más reciente » « Entrada antigua Inicio
Suscribirse a: Enviar comentarios (Atom)

Labels

  • Alimentación y nutrición (29)
  • Anticonceptivos (17)
  • Articulaciones (5)
  • Artículos de Interés (318)
  • Belleza (49)
  • Bienestar (2)
  • Bucodental (1)
  • Cancer (73)
  • Cardiología (1)
  • Consejos (66)
  • Depilación (3)
  • El colesterol (3)
  • El dolor (3)
  • El embarazo y Maternidad (185)
  • El síndrome (1)
  • En forma (42)
  • Enfermedades (13)
  • La celulitis (19)
  • La diabetes (1)
  • La inflamación (2)
  • La mamografía (2)
  • La menopausia (81)
  • La psicología (49)
  • La salud (8)
  • Las varices (7)
  • Libros (1)
  • Los glúteos (1)
  • Los trastorno (2)
  • Maternidad y trabajo (2)
  • Menstruación (30)
  • Noticias (132)
  • Pareja (1)
  • Problemas de salud. (16)
  • Recomendaciones (2)
  • Salud vaginal (1)
  • Según estudios (20)
  • Sentirse bien (2)
  • Ser madre (1)
  • Sexología (9)
  • Síndrome premenstrual (5)
  • Trucos (7)

Blog Archive

  • mayo 2017 (6)
  • abril 2017 (14)
  • marzo 2017 (16)
  • febrero 2017 (14)
  • enero 2017 (15)
  • diciembre 2016 (15)
  • noviembre 2016 (14)
  • octubre 2016 (8)
  • septiembre 2016 (13)
  • agosto 2016 (13)
  • julio 2016 (12)
  • junio 2016 (12)
  • mayo 2016 (15)
  • abril 2016 (15)
  • marzo 2016 (18)
  • febrero 2016 (17)
  • enero 2016 (20)
  • diciembre 2015 (18)
  • noviembre 2015 (19)
  • octubre 2015 (18)
  • septiembre 2015 (18)
  • agosto 2015 (15)
  • julio 2015 (10)
  • junio 2015 (14)
  • mayo 2015 (23)
  • abril 2015 (24)
  • marzo 2015 (19)
  • febrero 2015 (12)
  • enero 2015 (13)
  • diciembre 2014 (13)
  • noviembre 2014 (17)
  • octubre 2014 (19)
  • septiembre 2014 (23)
  • agosto 2014 (3)
  • julio 2014 (4)
  • junio 2014 (5)
  • mayo 2014 (18)
  • abril 2014 (21)
  • marzo 2014 (17)
  • febrero 2014 (19)
  • enero 2014 (29)
  • diciembre 2013 (23)
  • noviembre 2013 (28)
  • octubre 2013 (15)
  • septiembre 2013 (17)
  • agosto 2013 (14)
  • julio 2013 (15)
  • junio 2013 (10)
  • mayo 2013 (21)
  • abril 2013 (23)
  • marzo 2013 (30)
  • febrero 2013 (24)
  • enero 2013 (6)
  • mayo 2012 (9)
  • abril 2012 (12)
  • marzo 2012 (21)
  • febrero 2012 (19)
  • enero 2012 (23)
  • diciembre 2011 (19)
  • noviembre 2011 (15)
  • octubre 2011 (13)
  • septiembre 2011 (19)
  • agosto 2011 (22)
  • julio 2011 (20)
  • junio 2011 (21)
  • mayo 2011 (19)
  • abril 2011 (17)
  • marzo 2011 (24)
  • febrero 2011 (20)
  • enero 2011 (30)
  • diciembre 2010 (30)
  • noviembre 2010 (2)
 
Copyright © Salud y bienestar para las mujeres. All rights reserved.
Blogger templates created by Templates Block
Wordpress theme by Uno Design Studio